Jesús, Maestro y Señor, llegados al final de este curso queremos, puestos en tu presencia, presentarnos y reconocemos tal y como somos, tal y como estamos, y escuchad ese ánimo tuyo para con nosotros.

Señor Jesús, el curso ha sido duro, se nos han hecho cuesta arriba ¡tantos momentos! Pero hemos llegado al final con la satisfacción del deber cumplido, con la gratificación más importante que es ver a nuestro alumnado contento y más maduro. Gracias, una vez más, por nuestra vocación de educadores.

Jesús, Maestro y Señor, ahora que echamos la vista atrás y evaluamos los pasos dados, te pedimos que perdones nuestros traspiés, nuestras omisiones, nuestros olvidos y nuestras faltas de caridad, si las hubiera habido. Te pedimos que nos hagas cada día más libres y responsables en todo cuanto llevamos entre manos.

Señor Jesús, te damos gracias por cada oración, por cada celebración, por cada reunión, por cada convivencia, por cada buena práctica, por cada logro, por cada nueva iniciativa y porque en todo te hemos sentido presente, caminando a nuestro lado.

Jesús, Maestro y Señor, en este día te damos gracias por todos y cada uno de nuestros compañeros de trabajo, de manera especial si cabe por aquellos que han tenido sobre sí la responsabilidad de dirigirnos: que ninguno de ellos se vaya de vacaciones sin encontrar en nuestra mirada un gesto de cariño y el deseo de continuar remando juntos mar adentro.

Señor Jesús, te damos gracias por las familias que nos han confiado, un curso más, la educación integral de sus hijas e hijos. Te damos gracias por sus muestras de apoyo, de cercanía y por la responsabilidad compartidas. Te damos gracias por haber podido educar en libertad, guiando a todos al conocimiento de la verdad, esa que nos hace realmente libres como tú.

Jesús, Maestro y Señor, concédenos a todos el merecido descanso. Que el verano sea tiempo de siembra. Que disfrutemos de la desconexión. Que carguemos las baterías. Que nuestro corazón se nutra de todo cuanto vivamos, para que iniciemos el nuevo curso con el deseo de saber más para servir mejor, con las energías necesarias para seguir haciendo escuela y educando personas. Así te lo pedimos. Amén

Con esta oración cerramos este curso 2021-22. A todos y cada uno de los que la recibís y a los que les llega por vosotros, gracias por la fidelidad y por dedicar cada día un espacio para orar juntos al paso del Evangelio cotidiano. Gracias por vuestra fe sencilla, gracias por vuestra oración compartida. Oramos hoy de modo especial por los que ya no están, de modo especial por Toni Vadell, amigo y obispo, obispo amigo, in memoriam. En septiembre, Dios mediante, nos volvemos a encontrar. Mientras, disfrutemos de otros ritmos, de otros paisajes y de tanto como se nos regala cada mañana. Sed buenos si podéis. Un fuerte abrazo. Paz y bien

 Óscar Alonso Peno

Responsable Área Pastoral FEC